Por: José Nova / Bureo
Anthony Álvarez ha tenido poco accionar en la creciente
industria cinematográfica de su tierra natal desde su protagónico junto a la
actriz Zoé Saldaña en la película La maldición del Padre Cardona (2005), del
director Félix Germán.
Parece que el mismo filme ha sido una maldición en la carrera del reconocido
actor. Sin embargo, él considera que el origen de su ausencia en este mercado
es porque varios directores dominicanos se han dado a la tarea de cerrarle las
puertas para que no pueda volver a trabajar.
Anthony Álvarez no tiene pelos en la lengua cuando de emitir sus juicios se
trata en torno a la calidad del cine en República Dominicana, al considerar que
algunos productores y directores locales quieren sacar provecho, simplemente
económico, del pueblo y no entregar trabajos de calidad.
“Cuando fui hace par de años a Santo Domingo me preguntaron y se mal interpretó
algo que dije. Mucha gente me crucificó y creo que también me eché de enemigos
a dos o tres cineastas, porque en su cara, en su programa, les dije la verdad,
les expresé lo que creía. A partir de ahí ha habido un bloqueo, porque nadie me
llama para hacer cine”, expresó Álvarez en una entrevista concedida a elCaribe
en la ciudad de Nueva York, tras participar como invitado en el programa radial
dParranda Radio Show.
Pese a lo expuesto, su mayor deseo es volver a la pantalla grande dominicana,
ahora que entiende que hay más posibilidades para el talento desde la
aprobación de la Ley de Cine (2010). “No he ido a Santo Domingo a presentarle
un guión a la Dirección General del Cine... Si alguien está haciendo algo en RD
estoy poniéndome a la orden de los realizadores, quiero trabajar como actor y
también que me den la oportunidad de dirigir algo en mi país. He visto algunas
películas, y me hubiese encantado estar en ellas, o por lo menos hacer casting.
Veo que muchos compañeros están trabajando y hace ocho años que no hago algo”,
manifestó.
Trabajo en el exterior
“Aunque he trabajado fuera, en lo que he realizado siempre mantengo mi país muy
en alto”, agregó el talentoso actor que debutó en el mundo de las series de
televisión con Mujer, casos de la vida real; luego apareció en El cuerpo del
deseo, Decisiones , Secreto de amor, Mi destino eres tú y Vivo por Elena.
En el plano internacional su carrera no se ha detenido. Ahora está haciendo una
transición en su carrera, tras establecer su propia compañía de producción,
llamada Azul Entertaiment, con sede en Nueva York.
“Estamos empezando como quien dice desde cero, después de hacer la serie El Don,
que fue nuestro experimento. Aprendimos mucho y a partir de ahí conseguimos
distribuidora para nuestros productos a nivel internacional”, reveló.
La serie El Don, en la que asumió el rol protagónico, aborda la historia de la
vida de un narcotraficante que acciona entre República Dominicana y Estados
Unidos.
También contó con las actuaciones de Marcelo Rodríguez, Dalia David, Fernando
Then, Iván Camilo, Modesto Lacen y Aquino Alfonso Rey, entre otras figuras de
Venezuela, México y Puerto Rico.
Para sus nuevos proyectos destacó que recientemente firmó un contrato de
distribución con profesionales que trabajan para la cadena Telemundo. Entre las
producciones futuras está en el proceso de pre-producción una serie que
realizará en la ciudad de Nueva York. También tiene un proyecto experimental de
cine, con el guión de un dominicano (no reveló su nombre). “Es una obra de
teatro que vamos a adaptar al cine”, adelantó Anthony.
“Quiero hacer cosas de calidad internacional, ya que he estado muchos años en
Televisa; luego, en Telemundo he aprendido algo que se llama ´calidad´. Si
ellos lo pueden lograr nosotros también estamos en ese nivel”, puntualizó el
actor, quien reside desde hace varios años en Nueva York, Estados Unidos, junto
a su familia.
Un actor abierto y muy franco
Al evaluar la filmografía que se ha realizando en la
República Dominicana en los últimos años, sostuvo que ya no hay justificación
para que los productores y directores entreguen al público trabajos de baja
calidad.
“Ya cuentan con los recursos económicos, las mejores grúas, las mejores cámaras
y las luces están allá (Santo Domingo). No hay excusa. Ahora el asunto no es la
flecha... es el indio. Ya se puede decir con franqueza quién es director de
verdad, quién no es director, quién es un negociante”, dijo Anthony Álvarez.
A pesar de los años recorridos en el mundo de la actuación, este talentoso
vegano continúa preparándose en el mundo cinematográfico. “Siempre estoy
aprendiendo, mejorando en las diversas áreas de esta industria”, indicó durante
la entrevista.
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